Si te duele, mis razones no son tan importantes

No lo conseguirás. Si crees que dar todas las razones del mundo para convencer al otro o para argumentar tus acciones u omisiones es la respuesta a tus quebraderos de cabeza. Los conflictos comienzan así.Conecta a través de las emociones y te abrirán todas las puertas y las ventanas del mundo para poder razonar. No te saltes este paso si de verdad quieres solucionar, acordar, crear y amar.

No somos razón, somos emoción. Sí, emociones cargadas de razones que impregnan cada una de nuestras decisiones. La razón es muy importante, claro que lo es! pero sólo cuando la emoción está serena y se deja cuidar.

Siempre he pensado que si tú y yo estamos aquí, en este mundo, es por una emoción. Alguien decidió ( por acción u omisión) que así fuese y aquí estamos; inmersos en una marea de emociones y razones tan locas como necesarias.

Lo que nos molesta no es no tener, no saber o no ser; lo que de verdad duele es NO SENTIR que se puede tener , se puede saber y se puede ser.

Comencemos a conectar y empatizar con nosotros mismos para saber hacerlo con los demás. Curemos nuestras heridas y demos a los otros la oportunidad de conocernos en nuestra mejor versión.

Buena semana para tod@s.