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La Pelaya te habla de la e

Buenos días! ¿Qué tal estás?. Hoy, finalizamos esta pequeña degustación del Método LLave.

La Ll propone que te llames por tu nombre. El autoconocimiento es clave para dar el salto y superarte.

La a te invita a averiguar el mensaje «oculto» de tus emociones. Ellas te «chivan» cuáles son los obstáculos emocionales y actitudinales a superar.

La v siempre apuesta por visualizaciones como bocetos de realidad. Recrea mentalmente y sin escatimar en detalles tu éxito y estarás un poco más cerca de él. Aviso importante! Recrear que te toca la lotería sin haber comprado décimo no es boceto de realidad.

Y hoy finalizamos esta pequeña cata del Método LLave en el que la e te incita a EXCITARTE Y A ENTRENARTE.

La excitación es motivación. La motivación es motor de acción. Ten siempre muy presente PARA QUÉ das el salto; para qué merece la pena el esfuerzo. Cuando las fuerzas flojeen apela a tus valores. Los valores son gasolina renovable para continuar el reto. Otro día hablamos de la importacia y el impacto de los valores en nuestra vida.

El entrenamiento es el hábito; la construcción de una nueva realidad. Entrenar implica calentar. Calentar es motivar, excitar. A partir de ahí estamos preparados para saltar, caer y levantar. Tenemos la energía y la actitud adecuada para recorrer el camino y disfrutar del proceso. Y, por propia experiencia, me veo en la obligación de recordarte que, independientemente del salto que quieras dar es fundamental el trabajo personal.

Me es indiferente si quieres convertirte en un formador de éxito, si quieres montar tu propia empresa, si buscas trabajo o quieres cambiar de actividad profesional. Me es indiferente si quieres cambiar tus relaciones personales o profesionales, tus hábitos e incluso la decoración de tu hogar. Para todo salto es fundamental la preparación y el calentamiento emocional.  Si no lo tienes en cuenta siento decirte que fracasarás.

Lo sé, la Pelaya a veces puede parecer dura y tajante. Quizás deba trabajar ese aspecto aunque hasta ahora ha comprobado que funciona poner las cartas boca arriba para que todo el mundo pueda ganar la partida.

Que tengas un estupendo día.

Aquí llueve, pero no importa. El agua alimenta, limpia, inspira e incluso nos obliga a salir de la zona de confort. Feliz día de agua.

Pase lo que pase #lallaverestúconacentoenlaú.

La Pelaya te habla de la v

Hola!, ¿Cómo estás?. Servidora, La Pelaya, bastante animada y sobre todo convencida del impacto del Método LLave.

Ya hemos hablado sobre la importancia de «LLamarnos por nuestro nombre» (LL).

Ya hemos comentado sobre la necesidad de «averiguar» el mensaje que nos traen nuestras emociones y estados emocionales (A).

Y hoy hablaremos del impacto de las visualizaciones: » Visualiza tu objetivo personal y/o profesional y emocional» (V).

La visualizaciones no son cuentos imaginarios, no necesariamente. Las visualizaciones son bocetos de realidad. A través de las visualizaciones entrenamos la mente. Imaginarte dando el salto que deseas te ayuda a:

  • Visualizar tu éxito.
  • Desarrollar una red neuronal que favorezca la consecución de tu objetivo.
  • Te prepara mentalmente para el reto que decidas asumir.
  • Es una buena forma de identificar pensamientos que te ayudan, desechar aquellos que te limitan inncecesarimente y generar nuevas perspectivas mentales que no habías contemplado.

Todas estas y muchas más son las bondades de un ejercicio tan potente como accesible. Se trata de entrenar nuestra mente para favorecer que desarrollemos destrezas  intelectuales y físicas. ¿Por qué crees que gran parte de los atletas o resto de profesionales de éxito utilizan sus visualizaciones y entrenan su mente?.  Y no, no es porque lea han patrocinado para que lo digan. Saben de la importancia de hacerlo.

Creo, que por   experiencia  propia ya sabemos lo que es afrontar una tarea o decisión cuando nuestra mente no está por la labor. Si no quiere subirse a la bici, no vamos a pedalear y como a alguien se le ocurra empujarnos ya sabemos lo que va a pasar.

Así que, ya sabes, visualiza tu éxito. Sea cuál sea tu objetivo convéncete del impacto positivo de las visualizaciones, recrea en tu imaginación escenas y ambientes  lo más detalladas posibles y repite, repite y repite hasta que la realidad se confunda con tu imaginación.

Además, quiero pedirte algo. Visualiza también tu objetivo emocional. Pase lo que pase con tu salto ¿Cómo te sentirás?.

Hoy, al volver a casa, pase lo que pase ¿Cómo te quieres sentir?. Pues, actúa en consecuencia. Funciona.

 

¿Qué opinas?

Siempre #lallaveerestúconacentoenlaú

Buen día.

La Pelaya

 

La Pelaya te habla de la a

Ayer ya vimos la importancia de llamarnos por nuestros nombre. Hacerlo, es el mejor punto de partida para saltar y avanzar.

Hoy, hablamos de la a. ¿A qué te invita la a? a AVERIGUAR. En concreto, a investigar y conocer el mensaje secreto de tus estados emocionales. Las emociones son chivatas. Nos quieren avisar de algo. En tu vida cotidiana tanto personal como profesional es común sentir muchas emociones. La clave está en la predominancia de ellas.  Cuando piensas en dar el paso, en saltar ¿qué sientes?, ¿cómo influye en ti y en tus actos lo que sientes?, ¿qué pensamientos te vienen a la cabeza?. Ahí hay pistas querido investigador.

Si cuando pienso en seguir adelante con un proyecto o cambio personal o profesional y aparece el miedo he de averiguar de qué me quiere avisar ese miedo. Posibilidades:

  • Que el miedo me quiera dar prudencia para pensar detenidamente en la decisión que voy a tomar. Eso está muy bien ¿no crees?. Entonces, tendré pensamientos tales como » Este asunto en concreto he de darle una vuelta…», «Voy a revisar esto…».
  • Que el miedo nos quiera sabotear. Ya sabes que el cerebro no es el mejor amigo de los cambios. Salvo los imprescindibles, le parecen un gasto innecesario de energía. Nuestro cerebro está más por la labor de «Más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer». Es nuestra misión conocer y entrenar el funcionamiento de nuestra cerebro. En esta situación el miedo genera pensamientos tales como «Ya verás, no va a salir bien», «No te metas en líos», «No eres suficientemente bueno para ello», «No lo mereces»…Esto, más que pensamientos son sentencias y poco sirven para evolucionar. Más bien nos «encierran» en perspectivas y situaciones limitadas.
  • Que el miedo nos esté avisando de algún peligro real e inminente que puede suceder.
  • Que el miedo aparezca  «sin Ton ni Son» porque en tu vida siempre lo hace. Tanto es así, que acabas tomando decisiones más por miedo que por ilusión o ganas. Al final, poco avanzarás.

La cuestión es que las emociones y los estados emocionales siempre nos avisan de algo. Hacerles caso, conocer su mensaje y gestionar las emociones es fundamental antes, durante y después del salto. De ello depende, muchas veces, el resultado del mismo.

La curiosidad nos permite averiguar para qué saltar, cómo hacerlo y qué hacer para solventar los obstáculos.

Averigua qué necesitas para dar el salto. Ya verás como, principalmente,  son recursos emocionales.

Averigua qué sientes ante el salto, gestiónalo y salta.

Yo ya salté y sigo preparando saltos.

Lo que ya no tienes que averiguar es que #lallaveerestúconacentoenlaú.

 

Que tengas un buen día.

La Pelaya te habla de la LL

Hola! ¿Cómo estás?, ¿Quieres saltar? Ya sabes a lo que me refiero. Quizás lleves tiempo con un necesidad interior de hacer cambios personales y/o profesionales. A eso le llamo saltar. Cruzar de un sitio actual a otro deseado; cambiar.

Es probable que tengas un proyecto en la cabeza, un deseo o una inquietud que poner en marcha. Y no sabes cómo empezar. Te diré cómo. Bueno, el Método LLave lo hará.

Hoy te presento a la LL. La LL te invita, sugiere e incluso te pide que TE LLAMES POR TU NOMBRE. No es broma. LLamarte por tu nombre no se refiere a dar tus datos personales. LLamarte por tu nombre hace referencia a lo siguiente:

  • Amigo/a mía, si alguien de verdad quiere saltar con mayores garantías de éxito ha de conococerse a sí mismo personal y profesionalmente. Muchas personas creen que se conocen pero luego se sorprenden con el feedback que les dan los demás. Algo no encaja.
  • LLamarse por el nombre implica conocer fortalezas y áreas de mejora REALES; cuanto más concretas sean, mucho mejor. Por lo tanto, cuando nos llamamos por el nombre lo hacemos basándonos en el presente y en la subjetividad más objetiva que podemos. Eso nos ayudará a evitar llamarnos por el nombre que nos gustaría tener. Esto suele ser bastante común, ¿no crees?.
  • Con respecto al salto que deseas dar, ¿tiendes a rodearte de personas fuga o tiendes a rodearte de personas fuelle?. Como podrás intuir las personas fuga son aquellas que perciben el mundo y sus posibilidades desde una perspectiva determinista; «Soy lo que soy y llego hasta donde llego», «El mundo es así,  qué le vamos a hacer», «El éxito sólo es para unos pocos entre lo cuáles ni estás tú ni estoy yo». ¡Qué bien suena, eh! Las personas fuelle nos motivan a superarnos, a evolucionar. Creen que la vida se puede construir y merece la pena el esfuerzo. El éxito no es asunto de unos pocos; el éxito también puede ser tu presente y tu futuro. Las personas fuelle son conscientes de las limitaciones y obstáculos pero también de las posibilidades de mejora. Estar cerca de ellas es toda inspiración; hasta cuando nos dan «collejas».
  • ¿EN QUÉ ERES LLAVE?, ¿Cuál es tu aportación de valor?. Si quieres dar el salto y aún no lo sabes esa ha de ser tu prioridad. Todos somos llave en algo. La clave está en saber en qué, querer ejercer de llave y trabajar para mantener en óptimo estado esa llave. Escribir sobre ello ayuda. Preguntar al entorno en qué eres llave, también.

Todo aquel profesional que quiera dar una propuesta de valor al mundo ha de saber e interiorirzar (creérselo) en qué es llave para los demás.  De lo contrario, pocas puertas abrirá.

Sí, lo se. Este es un resumen muy resumido de la LL del Método LLave. Si quieres saber más o hacer alguna consulta personas sobre ello sólo has de escribirme a ana@lallaveemocional.com.

Mañana seguiremos con la A. Te va a interesar.

Y recuerda que, pase lo que pase, #lallaverestúconacentoenlaú.

Y dice La Pelaya que ella también es buena profesional

“Eres de las normales” me dijo mi hijo Jon ayer cuando intentaba finalizar con éxito mi ocurrencia de bañarlos a los tres a la vez. Eso me pasa por preguntar. Después de indagar sobre mis defectos y virtudes como madre y  descartar opciones como comprar más regalos encontré un área de mejora a tener en cuenta. “Aunque la mayor parte de las veces mantienes la calma, hay veces que no” me dijeron los dos hermanos. Menos mal que Malen sólo tiene un año y aún no cuenta como jurado. El caso es que acordamos nuevas pautas de actuación para que esta humilde madre  mantenga más y mejor la calma. De momento parecen funcionar aunque, todo hay que decirlo, estamos en la “exaltación” de la intención. Veremos cómo va el tema.

¿Para qué te cuento esto? Pues, para decirte  que esta semana tengo un regalo para ti. La falta de tiempo y, por qué no reconocerlo, cierta procrastinación en la participación activa en las redes  hace que no me asome demasiado por estos lares. Y, además de  madre de familia numerosa también soy una profesional en propósito de enmienda con la red.

Creo que tengo mucho recorrido de mejora pero sé que cada día  hago mejor mi trabajo. Lo sé porque lo siento. Lo sé porque me lo dicen. Lo sé porque tengo claro que un buen profesional no ha de tener miedo al salto. Saltar puede ser aprender, promocionar, ampliar o cambiar de trabajo. Saltar es decidir acercarte al objetivo. Y, por eso, voy a compartir con todo aquel que lo quiera conocer un cachito de mi método. El Método Llave. A mí y a muchos profesionales les ha servido de ayuda.  Espero que a ti también. Cada día de esta semana compartiré una parte del método. ¿Para qué? Para convencerte de que pase lo que pase, sea lo que sea #lallaverestúconacentoenlaú.

Y antes de empezar me gustaría preguntarte algo: ¿Eres un profesional impostor?. Tanto si lo crees como si no, estás en lo cierto. La clave está en que elijas la opción que más ÚTIL te resulte. Sentirse un poco impostor siempre viene bien (sentirse no es ser). Ya sabes, en su justa medida, es como el miedo, nos da prudencia y nos invita a aprender y evolucionar. El problema viene cuando nos pasamos de dosis y nos acabamos identificando con un impostor de manual que no va ni para adelante ni para atrás.

Nadie es impostor por desear cambiar y mejorar.

Nadie es un impostor por querer generar valor.

Nadie es un impostor por tener una forma diferente de hacer las cosas.

Nadie es impostor por querer ser y pertenecer.

Los impostores no generan valor ni evolucionan.

Así que si te ronda la cabeza hacer cambios, saltar y evolucionar, que sepas que no eres un impostor; eres una apuesta segura porque #lallaverestúconacentoenlaú.

Buen día.

La Pelaya quier ser mejor profesional.